miércoles, 30 de mayo de 2007

La lapidación

Otra forma de maltrato a las mujeres que se sale de nuestra cultura pero no de la de muchos países africanos o de religión islámica es la lapidación. Es una muerte producida por el lanzamiento de piedras a una persona que está enterrada hasta el cuello o atada de algún modo. En cualquiera de los casos en los que se lleva a cabo, esta práctica es condenable, pero adquiere un significado especialmente detestable cuando se aplica a una mujer porque ha mantenido relaciones sexuales de las que ellos llamarían “ilegales”, es decir, fuera del matrimonio, sin estar casada, con una persona de otra religión diferente a la suya…

La lapidación era más común y generalizada antes de la aprobación y el reconocimiento de los Derechos Humanos. A medida que esos derechos se fueron adoptando, se abolió la práctica. La última noticia de la que se han hecho eco los medios de difusión sobre este aspecto ha sido el apedreamiento de Doaa Aswd Dekhil, una chica iraquí de 17 años. Los varones de su familia la sometieron a esta muerte tras descubrir que se había enamorado de un joven musulmán y que se había convertido al Islam para casarse con él.
Este vídeo muestra la dureza de este tipo de asesinato. Un aviso para navegantes:PUEDE HERIR LA SENSIBILIDAD.






Sin embargo, uno de los nombres que más ha sonado por este motivo ha sido el de Amina Lawal. Esta mujer nigeriana fue condenada a ser lapidada por tener un hijo después de haberse divorciado. En los Estados del norte de Nigeria se aplica la sharia, la ley musulmana, dado que los musulmanes son allí mayoría, sin embargo, los abogados de Amina consiguieron demostrar que el juicio no se había celebrado correctamente y logró que la absolvieran.
También Safiya Hussaini se enfrentó a un juicio de este tipo y también resultó condenada a morir apedreada por adulterio. En este caso, la asociación Amnistía Internacional lanzó una campaña a nivel mundial que dio a conocer lo que estaba ocurriendo y que pedía firmas para evitar que se materializase la condena. Esta fue una de las razones que llevó a la suspensión de la sentencia.
Estas dos mujeres pudieron librarse de un final como el que supone la lapidación, sin embargo, cada día se asesina a cientos de féminas como blanco de piedras que lanza una multitud enfebrecida. Cuando mueren, no sólo lo hacen ellas, sino que una parte de los derechos de la población mundial se ven violados y ninguneados, de ahí que seamos todos juntos quienes debamos luchar para evitarlo.
Otro tipo de maltrato

1 comentario:

Alvaro.Gonzalez.Fernandez dijo...

Hola está muy bien el reportaje que comentas es muy interesante.
Soy Álvaro González estudiante de ii de la uc3m y mi Blog es http://alvarocarsmania.blogspot.com/
Saludos